Capítulo cuarenta y seis

Aspen

Aspen: Creo que recuerdo algo...

—Al menos, eso creo... —murmuro para mí misma después de presionar el icono de enviar en mi pantalla.

—¡Ah! —grito, sobresaltada cuando mi teléfono empieza a vibrar en mi mano con una llamada entrante—. ¡Mierda! Es él.

—¿Hola? —digo torpemente al contes...