CAPITULO 54

Alessandro y yo nos sentamos en la sala de espera hasta que salieran mi padre y mi tío, nos abrazábamos allí besándonos despacio, la señora Alessa y Mara estaban sentadas a nuestro lado, a veces nos observaban, pero eso no nos molestaba, más estábamos preocupados por la salud del padre de mi novio

...