Capítulo 34

Fruncí el ceño —Yo también te quiero. ¿Kaden? ¿Estás bien?— pregunté sin dejar de fruncir el ceño.

Él negó con la cabeza y parpadeó —¿Eh? Oh, sí. Estoy bien— sonrió.

Le devolví la sonrisa y tomé su mano debajo de la mesa. Él suspiró y apretó mi mano suavemente.

Jasmine puso el maíz y las judías v...

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