Capítulo 41

—No, Kaden. No estoy enojada —dije sarcásticamente.

—No me aproveché de ti. Lo prometo —sonrió.

—Oh... —me quedé en silencio—. Lo siento —puse mi cara de inocente.

—Está bien —dijo, poniendo sus manos a los lados de mi cabeza, atrapándome.

Se inclinó y colocó sus labios sobre los míos suavemente...

Inicia sesión y continúa leyendo