Capítulo sesenta y seis.

Un día de tranquilidad.

A la mañana siguiente, Daniel se despidió de Leticia con un beso rápido antes de subirse al auto.

—Tengo un par de reuniones importantes, mi amor. Te veo esta noche. Que disfruten con Dottie y con tu abuela.

—Tú también, cariño. Te amo.

Leticia se quedó en la puerta, ...

Inicia sesión y continúa leyendo