Capítulo 34

Alan

Alan se sorprendió de lo lejos que había llegado su cautiva para no entrar en «su habitación». Se preguntó, no por primera vez, en qué demonios estaba pensando. Sabía que era lo último que debía hacer, invitarla a su espacio. Ya se había infiltrado demasiado en sus pensamientos. Cuanto más...

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