Capítulo 42: Sospechas y sombras

Una corriente fría y cosquilleante recorrió la piel de Kara, quien se quedó petrificada ante el impulso de Alessandro, dejando que los labios de él saborearan los suyos con hambre.

Su respiración empezó a acelerarse al compás de los latidos de su órgano vital, que danzaba emocionado, pero sorprendi...