Confesión y debilidad

Athena

Cuando desperté, me encontré sola en la cama. Los rayos del sol fueron los responsables de despertarme.

Bostezando, me froté los ojos para quitarme la somnolencia y bajé de la cama. Mi ánimo no era tan pesado como en otras ocasiones porque la noche anterior no había sido difícil para mí, to...