Capítulo 41

—Deberías irte a casa y descansar un poco — sugirió Ángelo enviando a mi lado y ofreciendo un vaso de café de la máquina dispensadora. Sonreí agradecida, un café cargado y caliente me responde un poco de una noche tan difícil. Mi padre tuvo que ser intervenido del corazón ya que había sufrido un ata...