Capítulo 39

Permanecí inmóvil por un segundo, esperando su reacción. Luego envolví mis brazos alrededor de su cuello y como si entendiera el mensaje, él movió sus labios, dándole paso a los míos. Su aliento alicorado me enloquecía aún más. Cuando su lengua rozó la mía, un escalofrío recorrió todo mi cuerpo. Sus...