CAPÍTULO 34: REVELACIONES.

-¿Cómo que no te llamas Allison? Es una broma, ¿cierto? —ella se colocó frente a mí, pensé que se iría corriendo, pero...no es muy inteligente que digamos. — ¿entonces cómo te llamas? —me miró curiosa.

-Nena, no creo que sea bueno que le digas, puede abrir la boca y traicionarte de nuevo. —me dijo...