El laberinto del tiempo

Las palabras de Seraphina la dejaron pensando, una súplica envuelta en una verdad innegable. Su expresión, su lenguaje corporal, todo en ella era tan convincente, tan sincero, que incluso Athena se sintió conmovida. Dudó, luego asintió lentamente, la firmeza en sus ojos suavizándose.

—Podrías haber...