Cincuenta y seis: Oscuridad relajante

Temperance

Soy consciente, pero mantengo los ojos cerrados mientras me doy cuenta de la sensación demasiado familiar del dolor esparcido por mi cuerpo.

Me duele la cabeza, y de repente temo que mi cerebro vaya a explotar y luego se filtre por mis oídos y nariz.

Con los ojos aún cerrados, trato de...