Capítulo 36 - Juguete

Serena

Padre todavía estaba a mi lado y metió sus dedos en mi coño desordenado y estirado. Gimió y se acomodó un poco más abajo en la cama. Entonces sentí mucha presión y, oh, mierda. Metió todo su puño dentro de mí. Empujó fuerte un par de veces, y sentí que la humedad se escapaba de mí. Sollozé...