Capítulo 358 - Roland me necesita - mdcuatro

Verónica

—¡Déjame solo Verónica! ¡¿NO LO ENTIENDES?!

Gritó y con esa aura malévola, fría y siniestra, se levantó y llegó a mí. Este Roland no me gusta, pero en vez de salir corriendo por instinto, porque está fuera de sus cabales, de su cordura, mi alma me impulsó a hacer lo contrario. Lo abracé.

...