Capítulo 34 – Disfruta de tu vida y de tu felicidad

— ¿Noemí?.

Alma tocó la puerta de la habitación y al no escuchar respuesta, simplemente entró.

Vio a la chica, con los ojos llorosos, acurrucada en una orilla de la cama. Eso le rompió el corazón.

— ¿Noemí?. — Alma se acercó a la jovencita, que seguía con su expresión preocupada. — ¿Qué pasó? No tie...