Cuatro días, 3, viernes, 2 p.m.: No digas cosas así cuando intento no acostarme contigo

JO

—¡Ah, sí! Justo ahí, ese es el lugar —dejo escapar un gemido de agradecimiento, al que Liam responde con una risa.

—No me pongas celoso —dice su voz amortiguada desde al lado mío.

—Lo siento, Liam. Mel tiene manos mágicas —levanto la cabeza—. Mel, tienes manos mágicas.

Mel ríe suavemente....

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