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Cuando le cuento a Miranda sobre esto más tarde, se atraganta con su té helado y me mira con los ojos muy abiertos.

—¿Ahí mismo en el baño de chicas? —pregunta, parpadeando rápidamente—. Normalmente es más discreto con eso.

—¿Más discreto? —le susurro de vuelta, con la cara ardiendo. Todas esas ve...

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