Capítulo 25

Él atraviesa la maleza circundante con una mueca en el rostro.

—¡Estás poniendo a prueba mi maldita paciencia, chica!

—Y tú estás poniendo a prueba mis malditas piernas, Pie Grande. Si quieres que me quede a tu lado, recuerda que tengo las piernas más cortas. Te adelantaste, así que tomé un desvío...