Piérdelo - Parte I

Entrenar con Phobos es pecaminosamente... arduo. Me ha estado enseñando todas las formas de matar a otro con un cuchillo durante las últimas semanas y, aunque a menudo me divierto en cada sesión, nunca deja de ponernos a prueba.

El primer día de mi entrenamiento, duramos apenas unos minutos, pu...