30. Bienvenido a casa

Caminé por la habitación, lentamente, mirando cada arma en la pared. Cada una tenía la marca de una Deidad. Algunas griegas, otras romanas, otras egipcias. Incluso había marcas de los Orisha y deidades celtas. Me pregunté si este era el lugar de entrenamiento de todos los Dioses y Diosas. Parecería ...

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