Capítulo 38

Rashad.

GRAN VERDAD…

Detallé como Caleb enderezó su espalda, y por supuesto me dio la cara sin parpadear, pero los ojos de Hadassa en él, seguían suplicándome.

—Golpeaste a tu hermana… y jodiste tu única oportunidad… —traté de hablar con calma, intentando contenerme todo lo que podía.

—No quiero un...