Capítulo 108

La herida de Orión era profunda y severa, casi cortando su torso por la mitad. La sangre brotaba de la herida y empapaba su ropa, tiñéndola de un rojo oscuro.

Apretó los dientes por el dolor y luchó por mantenerse consciente mientras intentaba evaluar la magnitud de su lesión. La herida era larga y...

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