Capítulo 38 Disolución de la empresa

Comieron en silencio. El restaurante estaba tranquilo esa mañana, con solo unos pocos clientes dispersos. Nadie prestaba atención a las dos mujeres sentadas en la esquina.

De repente, Diana levantó la vista.

—Gemma, ve al restaurante de al lado y cómprame un juego de cubiertos con su logo. Y tráem...

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