Capítulo 86 Amor prohibido

—Pero tu pie está lastimado. Aunque fueras una desconocida, igual te ayudaría. Es lo correcto— insistió Walter, negándose a soltarla.

No podía quedarse parado viendo a Christina cojear.

Christina esbozó una sonrisa amarga.

—La última vez en la Mansión Cavendish, todos pensamos lo mismo, pero term...