Obsesión sensual

Se detienen en la heladería. Hablan y sonríen mientras entran. La sonrisa que ella le da me hace querer destrozarlos a ambos. Ella no puede sonreír así a nadie. Y sí, soy consciente de que suena psicótico, ¿me importa? Para nada.

Esperamos unos minutos antes de entrar tras ellos. Si entro de inmedi...