Capítulo 127

Amaris cerró los ojos para concentrarse lo más que pudo.

—¡LO HICISTE! —exclamó Anna.

Sobresaltada, Amaris abrió los ojos. Había una burbuja verde del tamaño de Anna junto a la estufa. Amaris podía ver a Anna a través de ella. Anna estaba usando su mano buena para tocar el lado de la burbuja.

—¿P...

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