Palacio de los monstruos

Él

Todavía podía saborearla.

Elowen. El nombre pulsaba en mis pensamientos y tenía la sensación de que me atormentaría cada segundo de cada maldito día.

Como una maldición.

Su sangre se aferraba a mi lengua, un sabor tan rico y raro que me hacía doler de maneras que no había sentido en sig...

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