Capítulo 41: El vestido

—Ahí viene —murmuró Zoe, cerca de mi oído.

En cuanto vi a la vendedora acercarse a nosotros, me dispuse a levantarme de la banca para contemplar que en sus manos traía varias prendas cubiertas de una bolsa plástica transparente. Su cara no tenía mucha expresión más allá de demostrar serenidad.

—Esco...