Capítulo 97 Su jefe roza sus labios

Michele asiente justo cuando tocan la puerta de la oficina. El CEO permanece de espaldas, mientras que su hijo da la orden de entrada.

—Buenas noches, disculpe señor Gershon, ¿necesita algo? Es mi hora de salida.

Daviana no deseo entrar en esa oficina, pero siempre se despedía antes de largarse, y n...

Inicia sesión y continúa leyendo