Una recompensa satisfactoria

Petros

Insistir en esperar a Liandra resultó ser un gran error. El sábado, mientras analizaba algunos informes en mi oficina en casa, fui interrumpido por la ama de llaves.

—Señor Kouris, su familia acaba de llegar —anunció.

Maldije, enfadado. No esperaba que vinieran sin avisar. Con pasos pe...