Capítulo 17.

Tenía, siendo generosa, la mitad de probabilidades de salir viva de aquello.

Lo sabía porque los lobos estaban desesperados por conseguir un par de osos para sus entrenamientos. Había escuchado los murmullos: antes de mi llegada cambiaban de oso con demasiada frecuencia, incapaces de encontrar uno ...

Inicia sesión y continúa leyendo