Capítulo 54

El cuerpo me funcionaba más rápido que la mente; era como si supiera exactamente dónde estaba Judy. Irrumpí en la casa y corrí tan rápido como pude hacia el sótano, siguiendo su olor. Era potente y cuando llegué al fondo del sótano, quedó claro por qué era tan fuerte y por qué mi lobo estaba enloque...

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