50. Entregarlo en los brazos de la muerte

Julio César había recogido las cenizas del cuerpo de Miranda con el dolor de la pérdida incrustado como una daga en su corazón, y las colocó en un recipiente de cristal en forma de elefante indio con la tapa en su espalda adornada con esmeraldas. Y esperó...

La noche cayó como un velo negro sin est...