Estoy aquí

Jack:

Una vez que llegamos a nuestra frontera, fue un viaje de veinte minutos hasta la casa. Goki estaba girando y aullando. Yo me sentía igual, pero estaba presionando contra mis jeans, lo que me hacía moverme cada pocos minutos. Eli tenía el mismo problema.

—¡Mierda! —ambos gemimos, luego es...

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