CAPITULO 61

Fue por algo de comida, pero vale ver que literalmente su rostro estaba en todas partes volvió a su escondite.

—Maldición —espeto frustrada estrujando su rubio cabello descuidado—, piensa Tabita, todas las carreteras deben estar llenas de policías, tu rostro y el de esa mocosa está en todo el país....