Estaré esperando

Camino con Aziel hacia la cafetería de la empresa, hambrienta como nunca. Él ha preordenado mi comida como de costumbre. Con su brazo alrededor de mi cintura, me ayuda a sentarme y toma el asiento a mi lado. La camarera que nos vio llegar se apresura a servirnos de inmediato.

—Señorita Windrug, bie...