Capítulo 15.

Desde la perspectiva de Zara.

—Déjame ir —le grité a Lila, la hermana del beta Lucian. Ella me empujó al suelo, quedé en cuatro patas.

—Te pareces más a un perro que a un lobo —levanté la cabeza para mirarla—. Deja de mirarme, cerda, o ¿quieres que te raje la garganta o tal vez, la mejilla izquier...