Capítulo 23

—Lo siento mucho, Cassie, pero vamos a tener que dejarte ir.

Las palabras que me dijeron esa mañana seguían resonando en mi cabeza. Rebotaban como una pelota de goma.

Lo había estado esperando, pero aún así me tomó por sorpresa.

Era solo otra cosa en mi vida que se estaba desmoronando a mi alrededor...