Capítulo 43

—Por favor, no se lo digas a nadie.

Esta vez fui yo quien extendió la mano para agarrar a Ward, desesperada por que este viejo aliado guardara mis secretos.

—No lo haré.

Ward colocó su mano sobre la mía, esta vez como un gesto de lealtad en lugar de afecto.

—Lo prometo, Mira —dijo con sinceridad...

Inicia sesión y continúa leyendo