Capítulo 31

Los ojos de Aurora se llenaron de lágrimas, solo pensar en perder su virginidad sin su consentimiento la enfurecía hasta lo más profundo.

Tragó saliva. Su corazón se negaba a aceptar la idea de ser violada, pero su mente, estaba llena de sospechas. Se levantó y miró a su alrededor, encontró su ropa...

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