Llama a tu madre.

Es media tarde cuando despierto, la luz se filtra a través de las cortinas en largas y perezosas franjas. Por unos segundos, no puedo entender qué me sacó del sueño, luego lo escucho. Chillidos, risas y el inconfundible sonido de pequeños pies golpeando contra la madera. El lado de la cama de Sage y...

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