Capítulo 5

Mandy

—Oh Dios —murmuró, deteniéndose para golpear su cabeza contra la pared en el momento en que dobló la esquina del cuarto de Blane—. Oh, Dios mío.

No podía haber hecho eso.

No podía haber abierto la caja de Pandora que era su atracción sexual hacia Blane.

Él no podía haberle devuelto el beso.

¿...

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