Capítulo 28: Hooligan

Colton se apresuró de regreso a la casa de Annalise, subió corriendo las escaleras y golpeó la puerta tratando de controlar la ira que ardía dentro de él. Annalise abrió la puerta, pero no había felicidad en sus ojos.

—¿Por qué estás golpeando mi puerta como un salvaje?

—Mamá... mamá... ¿está Gise...

Inicia sesión y continúa leyendo