33. A medida que pasa el tiempo

Los pasillos del hospital se llenaron de silencio al caer la noche. Solo ocasionalmente se escuchaban los pasos de las enfermeras y los anuncios crepitantes desde fuera de las habitaciones.

Sofía insistía en quedarse conmigo, pero tampoco debía dejar sola a su madre. Mis intentos de persuadirla hab...

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