Capítulo 201

Después de nuestra ducha, me aseguré de que la herida de Romeo estuviera bien seca. Decidimos dejarla al aire, tal vez así sanaría más rápido, o eso pensé yo, no es que esté acostumbrada a heridas de bala, pero en fin. Romeo pidió algo de comida para nosotros, lasaña italiana auténtica y una ensalad...