Capítulo 33 - Su inocencia me domina

Santos

Le di un beso en la mejilla después de terminar de abrochar su cinturón, extrañas sensaciones surgieron de no tengo la más mínima idea, pero ganas no me faltaron para sucumbir ante su petición.

—Pequeña, mañana, cuando estés libre de alcohol en las venas, pídeme esto mismo y sin dudas te lo...