Capítulo 54

Lucciano arregló su ropa y ayudó a Luggina a vestirse. El tiempo de estar en el aire se terminaba.

Acarició sus mejillas y besó sus labios

— Fue mejor que el sueño. — Susurró sobre sus labios.

— Ya lo creo profesor.

Bajaron del globo y el cielo se abrió en una fuerte lluvia.

Corrieron al auto y sali...