Capítulo 97

Con una sonrisa satisfactoria, Pablo Rúales se sentó al lado de Mía Intriago, esta suspiró y lo fulminó con la mirada.

—¡Ahora qué!, ¿me vas a decir que no te gustó el plan?, si todo salió como lo planeamos

—Quizás para ti si, pero para mí no, Santi no quiere hablarme, me odia y creo que no me querr...