Capítulo 11

De pronto me siento incómoda y no es exactamente por esas figurillas que me observan desde los estantes o el sonido de un tic tac de algún reloj cercano que en realidad no puedo distinguir, sino porque presiento que algo malo va a pasar.

—No pierdes nada con preguntar—escucho a la distancia y unos ...

Inicia sesión y continúa leyendo